Por Flavio Goldvaser
A menos de un mes de haberse realizado la Conferencia Mundial de Contra-Terrorismo Financiero llevada a cabo en Paris, Francia durante Abril del 2018. Y a menos de una semana de una acción sin precedentes conjunta del Departamento del Tesoro Americano y el Gobierno de Emiratos Árabes Unidos. En la que ambos países desarticularon una red financiera en este último país. Integrada por la Fuerza Qods-Guardia Revolucionaria Iraní (IRGC-QF), el Banco Central de Irán, y el Banco al-Bilad Islamic Bank (Irak). Bajo cargos de mover millones de dólares para permitir la expansión de la agenda violenta y terrorista de Hezbollah.
Y como parte de la salida de Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán. En lo que a nuestro entender, es un fortalecimiento de las políticas de la nueva administración americana para bloquear a Irán y sus satélites políticos. Y en lo que representa un cambio fundamental de la visión política internacional del conflicto árabe-israelí. Por parte de los países árabes no shiitas de la región del golfo y de la que todavía no tenemos visión de todo su alcance y los cambios que pueden llevar al Medio Oriente.
En una ofensiva política financiera el día 16 de Mayo el Departamento del Tesoro Americano a través del Office of Foreign Assets Control (OFAC). En conjunto con Arabia Saudita, el Reino de Bahréin, el Sultanato de Omán, Qatar y Emiratos Árabes Unidos todos ellos miembros del (TFTC) Centro de Combate del Terrorismo Financiero. Firmaron un acuerdo de cooperación de intercambio de información e inteligencia, financiera internacional y actividades relacionadas con el terrorismo. Bajo el manto de la (E.O.) Orden Ejecutiva 13224 del gobierno americano de combate al terrorismo. Por la cual se rechaza la existencia de cualquier tipo de división entre el ala política del Partido Libanes Hezbollah, su Consejo rector o Shura y su ala militar. Asumiendo que una no podría existir sin la otra y que ambas forman parte de la misma organización terrorista internacional. Por lo que se hacen extensivas las prohibiciones de realizar operaciones financieras internacionales sancionando a todas las instituciones que hagan posible estos intercambios. Y así mismo sancionan en forma personal a: Hasan Nasrallah, Secretario General de Hezbollah, Naim Qasim, Muhammad Yazbak, Husayn Al- Khalil, e Ibrahim al-Amin al-Sayyid, todos miembros del ala política de Hezbollah.
Los firmantes del acuerdo reconocen a Hezbollah y a sus directivos como parte y miembros de una organización terrorista internacional. La que bajo los dictados de la Guardia Revolucionaria Iraní y la Fuerza Militar Qods (IRGC-QF). Prolongan el sufrimiento humano en Siria, perpetuando la violencia civil y sectaria en Iraq y Yemen. Como a su vez poniendo en riesgo la integridad del Estado Libanes y su pueblo y de desestabilizar toda la región (en una velada referencia al conflicto con Israel).
La firma de este nuevo acuerdo en el día de ayer complementa el artículo publicado en este mismo medio. Y en el que detallamos como EE.UU. quiere doblegar a Irán financieramente y en última medida hacer caer su régimen político. Y del que recomendamos su lectura para tener una visión más amplia de los nuevos acontecimientos del conflicto que nos atañe. Ya que con este nuevo compromiso internacional no solamente dejan de lado a Europa que se no se encuentra dispuesta a cooperar en la interrupción de sus nuevos lazos comerciales y financieros
con Irán. Sino que también trata de abarcar la totalidad de las actividades iraníes en la región y el mundo incluyendo a Hezbollah.
Debemos indicar al lector que el documento de sanciones es más extenso e incluye a otros actores como así la descripción de sus actividades pero que por razón de economía en la lectura dejamos pendientes para una próxima redacción.
Por último debemos mencionar que este articulo fue escrito gracias y en base a documentos proporcionados por el US Department of the Treasury.
