Los videojuegos podrán incluir esvásticas y otros símbolos nazis, anunció el jueves el organismo alemán de autoregulación de software de entretenimiento (USK) luego de un acalorado debate sobre la franquicia “Wolfenstein” en la que los jugadores luchan contra las fuerzas del Tercer Reich.
Anteriormente se consideraba que el juego estaba en falta con el código penal alemán, que prohíbe cualquier representación de los llamados símbolos anticonstitucionales, incluidas las esvásticas nazis.
En consecuencia, en “Wolfenstein II”, las imágenes de Adolf Hitler fueron adulteradas para quitarle el bigote y la esvástica en la bandera nazi fue reemplazada por un símbolo triangular. Esto provocó un escándalo en la comunidad de jugadores, lo que provocó reclamos al USK para que los juegos fueran tratados como películas.
Debido a que las películas se consideran obras de arte, están exentas de la prohibición, de manera similar al material utilizado en investigación con fines históricos o científicos. Las películas ambientadas en la época de la Segunda Guerra Mundial, por ejemplo, pueden proyectarse en Alemania con símbolos nazis.
El Cuerpo de Autorregulación de Software de Entretenimiento (USK) anunció ayer que, a partir de ahora, los videojuegos serán examinados en cuanto a si pueden considerarse parte de tales excepciones.
El organismo, que es responsable de proporcionar clasificaciones de edad para los videojuegos, tomó la decisión después de que los Servicios de Protección a la Juventud de Alemania le asignara la tarea de determinar qué es socialmente permisible en los videojuegos.
“A través del cambio en la interpretación de la ley, los juegos que examinan críticamente la actualidad pueden por primera vez recibir una clasificación de edad”, declaró Elisabeth Secker, directora general de USK.
“Este ha sido el caso durante mucho tiempo para las películas y en lo que respecta a la libertad de las artes, ahora este es también el caso con la computadora y los videojuegos”, sentenció. USK realizará su nueva tarea de manera responsable, agregó.
Fuente: Iton Gadol
