Asimilación y divisiones internas, entre los principales problemas que enfrentan las comunidades judías de Latinoamérica

Así lo indica el resultado de una encuesta realizada conjuntamente por el Congreso Judío Latinoamericano y la consultora argentina Poliarquía. Para el informe fueron encuestados líderes de opinión y voluntarios de las distintas comunidades judías de Latinoamérica.

Los principales problemas que perciben los líderes comunitarios en sus comunidades no son amenazas externas, sino desafíos internos, concluye el informe de una encuesta realizada por segundo año consecutivo por el Congreso Judío Latinoamericano y la consultora Poliarquía. En 2018 los principales problemas -según los encuestados- son: divisiones internas en la comunidad, la dirigencia comunitaria y la asimilación. 

En contraposición a esto, el 86% de los encuestados considera que es entre "muy" y "bastante" seguro vivir abiertamente como judío en su país y no ven un alto grado de antisemitismo en su entorno.


"El resultado de la encuesta plantea un gran desafío para los líderes de las comunidades judías de la región", expresó el Director Ejecutivo del Congreso Judío Latinoamericano, Claudio Epelman.

El 75% de los encuestados creen que en su país hay actos aislados de antisemitismo pero no ven un alto grado de antisemitismo. Al igual que en el 2017, los encuestados indican la ignorancia y el desconocimiento como las principales causas del antisemitismo. A su vez, tres cuartas partes de la comunidad cree que hay que trabajar en toda forma de discriminación, y no solamente enfocarse en el antisemitismo. 



"Esperamos que los datos que brinda el informe sean un aporte significativo para los tomadores de decisiones de cada una de las comunidades de la región y sirvan para delinear estrategias de acción", dijo Epelman.

La mitad de los encuestados afirma que la comunidad judía en su país cuenta con la infraestructura necesaria para garantizar la seguridad de la comunidad, pero sólo el 35% considera que tiene garantizada su seguridad. En líneas generales, se percibe un leve descenso de la sensación de seguridad en la comunidad.

En cuanto a las relaciones con otras comunidades, más del 70% de los encuestados cree que hay que tener un acercamiento con el mundo musulmán y con el colectivo LGTB, pero reconocen que hoy el vínculo es distante.

Con respecto al conflicto en Medio Oriente, el 82% de los encuestados creen en la solución de los dos estados (se mantuvo el mismo porcentaje que en la encuesta de 2017). Casi la mitad de los encuestados cree que Jerusalem debe ser la capital de ambos Estados. Este número ascendió de 43% en 2017 a 48% en 2018.



A su vez, más de la mitad de los encuestados cree que la paz entre israelíes y palestinos llegará en más de 5 años.

Por último, respecto al traslado de la embajada de EEUU a Jerusalem, dos tercios están de acuerdo con el traslado, mientras que el 41% cree que esta decisión afectará negativamente a la comunidad judía. Quienes lo consideran positivamente lo relacionan con alcanzar la paz, y quienes lo consideran negativo, lo atribuyen a cuestiones de seguridad.