Roman Abramovich, propietario del Chelsea |
El Chelsea se prepara para introducir una novedosa estrategia para combatir el racismo y el antisemitismo de algunos de sus hinchas: les dará a elegir entre ser sancionados y perder su abono al estadio, o un viaje a los campos de concentración nazis en Auswichtz, Polonia, para aprender de las atrocidades que sucedieron allà en el Holocausto.
Según el diario The Sun, esta iniciativa proviene del propio dueño del club, el ruso Roman Abramovich, que a su vez es judÃo. “Si solo se prohÃbe a la gente, nunca cambiarás su comportamiento”, aseguró Bruce Buck, presidente de los Blues.
“Esta polÃtica les da la oportunidad de entender lo que han hecho, para que quieran comportarse mejor", explicó Buck, quien explicó que "es difÃcil actuar cuando un grupo de 50 o 100 personas son los que insultan, pero si tenemos individuos que podemos identificar, podemos actuar".
De acuerdo al medio inglés, el equipo londinense está tan comprometido con el proyecto que se hará cargo de todos los costos de los viajes.
Fuente: Olé