El gabinete de seguridad de Israel parece haber decidido lo que la población del sur de Israel le pide hace meses: retomar la iniciativa y dar una respuesta contundente a los terroristas del Hamas y sus lacayos. Esto tomarÃa forma mañana luego de los previsibles incidentes de todos los viernes.
La impresión, por el despegue de fuerzas, es que Israel entrará en Gaza para establecer una especie de zona de seguridad de casi un kilometro de ancho para neutralizar asi el lanzamiento de balones incendiarios y destruir otros túneles. En un año ya se destruyeron 14 túneles del Hamas; 5 ingresaban a territorio israelÃ. Como el Hamas no esta interesado en un choque directo y frontal con Israel sino mantener cierta escalada, probablemente mañana bajen la intensidad de concentración de manifestantes o lanzamiento de globos. El Hamas que sabe que es militarmente mucho más débil no busca un enfrentamiento directo con Israel pero el gobierno israelà ya no puede soportar las protestas de los habitantes del sur que desgastan su imagen. Un portavoz del Kibut Yad Mordejai dijo que " hay que poner fin al descontrol del Hamas en la región ". Un vocero del Consejo Regional Neguev expresó " pedimos al gobierno que deje de vacilar ante el terror ". " No se puede vivir pensando que un dÃa penetran terroristas en el kibutz y hace una masacre ". " Tenemos sentimientos encontrados ",dijo otro integrante de Yad Mordejai. " Por un lado no queremos que los soldaos arriesguen sus vidas pero por el otro asi no se puede vivir más ".Todo parece indicar un viernes distinto. Ya no se trata de francotiradores. Israel acumuló un par de miles de soldados y tanques de guerra no para evitar sino eliminar toda infiltración.
