¡Cuchillos, misiles, túneles y algo más!


POR MIGUEL TRUZMAN TAMSOT

A Israel se la acusa de Estado apartheid y genocida, pero en realidad, el único genocidio educativo y cultural, lo cometen las propias autoridades que gobiernan los territorios de Judea y Samaria

No conozco Estado que haya sido amenazado, hostigado y sancionado desde el mismo momento de su creación, como Israel.

Desde el 14 de mayo de 1948 se le trato de aniquilar por parte de cinco naciones, en la llamada guerra de independencia, siendo que, de ahí en adelante, se han utilizado todos los medios disponibles tanto bélicos como de terror o diplomáticos para disolver a la única nación judía del mundo.

Desde sus fronteras norte y sur, se apertrechan grupos terroristas como Hamas y Hezbollah, que han amasado una inmensa fortuna entre donaciones “filantrópicas” y ayuda de regímenes afines con sus propósitos, para adquirir y manufacturar miles de misiles de corto y mediano alcance, así como en la construcción de túneles, que traspasen la frontera tanto de Gaza como ahora del Líbano, para adentrarse en territorio Israelí y cometer la mayor cantidad de asesinatos a civiles posible, tratando de causar pánico en esas poblaciones fronterizas.

Israel ha descubierto en los últimos días, cuatro túneles de grandes dimensiones con la frontera del Líbano, haciendo la respectiva denuncia en la ONU, solo para dejar asentada la situación, a sabiendas que ese organismo, no hará nada al respecto, ya que solo pondrá atención cuando haya alguna investigación contra Israel que concluya en una resolución sancionatoria, como ha sido lo usual en los últimos tiempos, en donde mas de la mitad de las mismas, son dirigidas única y exclusivamente hacia la única democracia liberal real y practica en el medio oriente, y mirando de lado ante las graves violaciones a los derechos humanos que se vienen realizando desde hace un buen tiempo en países como Turquía, Siria, Irán, Yemen, Somalia, Cuba, Nicaragua y Tunes entre otros.

Por otro lado, con una población Árabe cercana a los 2 millones de personas, Israel alberga a un enemigo interno de cuidado, en el entendido que con solo la radicalización del 2% de esa población, es decir alrededor de 40 mil individuos, se han causado en época reciente y se podrían exacerbar los atentados a lo interno de Israel, a través de bombas, arrollamientos con vehículos, agresiones con armas blancas entre otros crímenes.

A Israel se la acusa de Estado apartheid y genocida, pero en realidad, el único genocidio educativo y cultural, lo cometen las propias autoridades que gobiernan los territorios de Judea y Samaria, es decir Hamas en Gaza y la Autoridad Nacional Palestina en Cisjordania, que aplauden, alientan y promueven la educación del odio y el martirio a los infantes de esas poblaciones desde la más tierna edad, inclusive poniéndoles nombres como ¨ cuchillo de Jerusalén¨ asignando a las calles nombres de terroristas que se inmolan asesinando a civiles inocentes en Israel o cualquier parte del mundo y enseñando en las escuelas y transmitiendo en los medios de comunicación de esas ciudades, las más variadas y diversas formas de odio, resentimiento y violencia contra el estado de Israel y los judíos en general.

Esta situación de suma gravedad en el ámbito educativo y cultural de los habitantes de dichas ciudades, debiera ser un tema tratado con seriedad por el liderazgo mundial, si se quiere buscar una solución real al conflicto, ya que una hoja de ruta en donde no se convenga en ese tema, no tendrá un efecto sanador para los intereses educativos, culturales, morales y éticos de los niños y adolescentes que son fácil herramienta del poder y la radicalización ideológica de dichas poblaciones, que serían en definitiva, los adultos de una eventual y futura Dios lo permita, época de paz y concordia entre Israel y Palestina.

Fuente: El Universal