“Pueden hacer lo que quieran allí, francamente“, dijo a los periodistas, refiriéndose a las fuerzas iraníes.
Los comentarios de Trump se produjeron dos semanas después de que sacudió a Jerusalem al anunciar que retiraría a todas las tropas estadounidenses de Siria. Los soldados estadounidenses habían liderado la coalición contra el grupo terrorista del Estado Islámico, al mismo tiempo que ayudaban a frustrar una infraestructura iraní permanente en el país devastado por la guerra.
Israel ha advertido repetidamente en los últimos años que Irán está tratando de establecer una presencia militar en Siria, donde está luchando junto a su representante libanés Hezbolá y Rusia para restaurar el régimen del presidente sirio Bashar Assad.
Los funcionarios israelíes también advirtieron que la ausencia de Estados Unidos abriría las puertas a Teherán para crear el llamado “puente terrestre” desde Irán, a través de Irak y Siria, al Líbano y al Mar Mediterráneo.
En los últimos años, Israel ha llevado a cabo cientos de ataques aéreos en Siria contra objetivos vinculados a Irán.
Sin embargo, Trump, el miércoles, dijo que Teherán, como Estados Unidos, estaba retirando sus fuerzas de Siria.
“Irán ya no es el mismo país”, dijo. “Irán está sacando a la gente de Siria. Pueden hacer lo que quieran allí, francamente, pero están sacando a la gente. Están sacando gente de Yemen. Irán quiere sobrevivir ahora“.
El presidente continuó diciendo que al retirarse del acuerdo nuclear con Irán el año pasado, Washington cambió el cálculo de Teherán y obstaculizó sus esfuerzos para desestabilizar y difundir su influencia en toda la región.
“Irán iba a apoderarse de todo y destruir a Israel mientras están en eso. Irán es un país muy diferente en este momento”, dijo, en comentarios que a veces eran incoherentes. “Están teniendo disturbios cada semana en todos los países. Me encantaría negociar con Irán… pero Irán es un país muy diferente en este momento“.
La decisión de Trump de sacar a las 2.000 tropas estadounidenses de Siria causó una reorganización importante dentro de su propia administración; su secretario de defensa, James Mattis, renunció tras el anuncio de la retirada.
El anuncio del presidente fue el primer punto significativo de disputa entre Washington y Jerusalem desde que asumió Trump el cargo (el primer ministro Benjamin Netanyahu, al parecer, le suplicó que reconsiderara la decisión) y ha fortalecido la percepción de que considera que la relación de Estados Unidos con Israel es transaccional.
El martes, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, dijo a Netanyahu que el retiro planeado de las fuerzas terrestres estadounidenses de Siria no alterará el compromiso de Estados Unidos para contrarrestar la agresión iraní y mantener la seguridad de Israel.
“La decisión del presidente sobre Siria de ninguna manera cambia nada en lo que esta administración está trabajando junto con Israel”, dijo Pompeo en una conferencia de prensa conjunta con Netanyahu antes de que sostuvieran conversaciones en Brasil.
Trump dijo la semana pasada que no creía que Estados Unidos retirara sus tropas de Siria pondría en peligro a Israel al fortalecer la mano de Teherán en uno de los vecinos inmediatos del Estado judío en el norte.
“Bueno, no lo veo así. Hablé con Bibi “, dijo. “Le dije a Bibi. Y, ya sabes, le damos a Israel $ 4.5 mil millones al año. Y se están defendiendo muy bien a sí mismos, si echas un vistazo… Así que así es como es”.
Trump culpó a la inestabilidad de Siria por las políticas de su antecesor, Barack Obama, quien no atacó a Assad después de cruzar la “línea roja” del ex presidente de Estados Unidos de usar armas químicas en su propia gente.
“No puedes hacer una amenaza y luego no hacer nada. Así que Siria se perdió hace mucho tiempo“, dijo Trump. “Además de eso, estamos hablando de arena y muerte. No estamos hablando de vastas riquezas”.
Fuente: The Times of Israel / Israel Noticias
