El ex ministro israelí acusado de espiar para Irán fue sentenciado a 11 años de prisión

Se trata de Gonen Segev, ex ministro de Energía en la década de 1990 que trabajaba para los persas desde 2012 y fue capturado seis años después. Se había declarado culpable para reducir la pena


Gonen Segev, el ex ministro israelí de Energía e Infraestructuras entre 1992 y 1995, fue condenado este martes en Jerusalén a 11 años de prisión tras declarase culpable de espionaje a favor de Irán, indicó el fiscal tras una audiencia a puerta cerrada.

El ex funcionario durante el mandato Isaac Rabin como primer ministro de Israel estaba acusado de suministrar a Irán entre 2012 y junio de 2018, cuando vivía en Nigeria, información sobre la localización de lugares sensibles israelíes así como nombres de responsables.

Se había declarado culpable en enero, por medio de un acuerdo entre la defensa y la fiscalía para reducir la pena.

La justicia señaló en ese momento que se había aplicado en este caso "una orden de secreto de sumario sobre los detalles que se penan", por lo que no se revelará más información en esta etapa del proceso.

En junio de 2018 la Fiscalía concluyó su investigación y presentó acusaciones formales contra el ex ministro, médico de profesión, que ya estuvo encarcelado entre 2005 y 2007 por intentar pasar de contrabando 30.000 pastillas de éxtasis de Holanda a Israel y falsificar un pasaporte diplomático.

Segev residió en Nigeria durante los últimos años y en mayo pasado se trasladó a Guinea Ecuatorial, donde fue arrestado y entregado a Israel tras una orden de extradición.

Tras su llegada al país, el ex funcionario fue interrogado por sospechas que indicaban posibles contactos con Irán y, el Servicio de Seguridad Interior israelí (Shin Bet) reveló que "se descubrió que fue reclutado y actuó como agente en nombre de la inteligencia iraní", según indicó la policía durante la investigación.

Según los datos desvelados, el acusado estableció contactos con la embajada de Irán en Nigeria en 2012 y se reunió dos veces con oficiales de inteligencia, a quienes habría informado sobre el mercado energético israelí y sobre lugares de alta seguridad, incluyendo información relativa a edificios y de miembros de organizaciones políticas y del aparato de seguridad del país.

A finales de agosto, el ministro iraní de Inteligencia, Mahmud Alavi, admitió que Irán tuvo como espía a un ex ministro de un país enemigo. "Hace un tiempo tuvimos al miembro del gabinete de un país hostil", dijo Alavi, sin nombrar el estado al que se refería ni la identidad del espía en cuestión

Fuente: Infobae / Con información de EFE y AFP