El comerciante, Taar Shaafut, de 32 años, trabajaba para Irán y su función era armar una red de espionaje en Judea y Samaria. Se cree que el paso siguiente hubiera sido formar células chiitas entre una población palestina sunnita y asi poder infiltrar la conducción palestina orientandola más hacia el Hamas, aliado de Irán en la región. Shaafut fue coaptado por los iranÃes en el 2018 en el marco de una visita comercial al LÃbano. Dos agentes iranÃes hablando árabe lo sobornaron y le plantearon la misión que el comerciante - sin antecedentes a la vista- aceptó.
Shaafut ingresó a Israel en diciembre de 2018 y volvio a regresar en abril del 2019. Desde entonces fue detectado en sus intenciones y seguido por la contrainteligencia israelÃ. Shhafut habrÃa propuesto a los iranÃes montar una fábrica en Jordania, con trabajadores chiitas que respondan al regimen, y empezar a negociar con Israel para poder operar con mayor cobertura en Judea y Samaria.
El ciudadano jordano fue detenido el 10-06 y esta acusado de montar una red de espionaje en favor de Irán y de alentar a la islamización chiita de palestinos residentes en la zona.
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