La enorme difusión que tuvo la serie Schtisel en el popular sitio de pelÃculas Netflix ha tenido repercusiones negativas para grupos jasÃdicos que viven en Nueva York , en especial en barrios como Boro Park, Crown Heights y Williamsburg, los tres de amplia población ultraortodoxa.
La exitosa serie israelà ha sido una de las más vistas en Netflix por público judÃo y no judÃo generando mucha curiosidad sobre la forma de vida estrictamente observante de los grupos jasÃdicos en EE.UU. y el resto del mundo.
El diario británico Daily Mail publica una serie de opiniones de judÃos ultraortodoxos que se sienten acosados fotográficamente por la publicidad indeseada obtenida. " Vamos caminando por la calle y turistas se nos acercan y nos sacan fotos sin siquiera preguntarnos ni pedirnos permiso para hacerlo ",dijo uno de ellos. Otro manifestó: " No somos animales en un zoologico como para que nos saquen fotos a cada instante. Reconozco que no es por antisemitismo pero es molesto ". Un tercero manifestó: " Es molesto que te saquen fotos, te pregunten si haces el amor con tu esposa mediante una sábana y lo peor es que te saquen fotos en pleno Shabat cuando usamos el shtraiml ( gorro de piel tÃpico de ciertos grupos jasÃdicos ).
Asi las cosas, Netflix, que visibilizó y derribó prejuicios sobre la ultraortodoxia, terminó generando esta sensación de indisimulable molestia.