El periodista Marcelo García presentó Perón y la raza argentina, un ensayo que aborda la relación entre científicos nazis y la Argentina peronista tras la caída de Adolf Hitler.
Perón y la raza argentina es el segundo libro de Marcelo García que expone una cara desconocida de los primeros gobiernos del Partido Justicialista.
En su investigación más reciente, el autor intentó encontrar las aristas de la “estrecha relación que tuvo el peronismo con el nazismo”. “Me interesa completar un poco la figura de determinados personajes históricos”, confesó.
García aseguró que ya antes del primer gobierno de Juan Domingo Perón “se refuerza la relación muy cercana con los nazis, en primera instancia todavía estando en la guerra y mucho más cuando se produce el final desastroso del régimen de Hitler”.
“Los nazis buscan puertos seguros y Argentina fue ese lugar elegido por ellos. La caída del nazismo coincide con el ascenso de Perón, que claramente tenía simpatías filonazis y de ideología fascista. Además, estaba rodeado de asesores nazis”, sostuvo.
Para el investigador histórico, la cercanía entre los alemanes exiliados y la patria justicialista se dio por “cuestiones militares, estratégicas y económicas”.
“Es increíble la cantidad de documentos que prueban la llegada de alemanes importante a la Argentina. Como Josef Mengele y Carl Værnet, médico danés de la SS que trabajó en Auschwitz”, reveló.
Bajo la óptica de García, la emigración de científicos nazis al país está vinculada con un plan para continuar con los aberrantes experimentos que los germanos realizaban en los campos de concentración.
“Værnet inicialmente trabajó en Buchenwald y patentó en Alemania un sistema muy cruel para ‘curar’ la homosexualidad, que luego se presentó a Heinrich Himmler”, afirmó.
El método consistía en injertar un tubo metálico en la ingle de las víctimas e inyectarlos con dosis de testosterona. Los procedimientos duraban aproximadamente un año y costaron la muerte de centenares de personas.
“Además, Værnet trabajó en los últimos tiempos de Auschwitz con Mengele en la fórmula de la eterna juventud. Ellos buscaban retrasar el proceso natural de envejecimiento de las personas y que las mujeres pudieran procrear durante más tiempo y que tuvieran embarazos múltiples”, explicó García.
El entrevistado alegó que documentos demuestran que el tenebroso médico danés “trabajó bajo órdenes de Ramón Carillo en el Ministerio de Salud durante el gobierno de Perón“.
“La ficha dice que se ocupaba de enfermedades infecciosas. Tenía su consultorio en Uriarte al 2200, en pleno barrio de Palermo. Hay testimonios de víctimas con las que él siguió experimentando con la cápsula que liberaba testosteronas. El fracaso era moneda corriente. Después probó con una serie de cócteles basados en remedios bebibles. Falleció en 1965 trabajando en endocrinología”, añadió.
Según el periodista, tanto Mengele como Værnet así como Walter Rauff, Hans Reiter, Ronald Richter y tantos otros involucrados con la experimentación humana en el Tercer Reich se radicaron en Argentina a través de dos oficinas de emigración clandestina que el peronismo instaló en Europa.
“En todos los casos, en las relaciones que permitían que esos médicos como otros jerarcas nazis llegarán, había gente relacionada al entorno de Perón, incluso indirectamente”, manifestó.
En esa línea, García señaló que Juan Domingo Perón tenía un proyecto de megalomanía absoluto y no abandonaba la idea de replicar de alguna manera el expansionismo de Hitler en Europa en Sudamérica”.
A su juicio, el líder del PJ lo intentó “fogoneando golpes militares en Paraguay, Brasil, Bolivia y Venezuela” y con la repartición de dinero en distintos puntos neurálgicos de esos países.
Hace click para escuchar el audio completo
Fuente: https://lauradimarco.cienradios.com/cientificos-nazis-peron-documentos-prueban/?fbclid=IwAR27bfibF68lZeUjsotidJ_q0O1CtoLzOFtMOIrFK2HU5D0v9AypILS1cjU
