“Todos los partidos están infectados por el virus del antisemitismo”, dijo Max Privorozki, jefe de la pequeña comunidad judía de Halle, Alemania en una entrevista reveladora al diario Bild, y agregó “no le recomendaría a nadie que camine por Halle con una kipá”.
La entrevista con Privorozki tuvo lugar diez semanas después de que el neo-nazi de 27 años Stephen Balliet intentara asaltar la sinagoga en Yom Kipur y asesinar a los 51 fieles que se encontraban dentro. Después del intento fallido, mató a dos alemanes no judíos cerca de la sinagoga. Balliet se suscribió a un punto de vista antisemita, escribiendo sobre el “gobierno ocupado por los sionistas”.
Privorozki dijo al periódico de mayor venta del país, Bild, que si Balliet hubiera tenido éxito habría sido el mayor asesinato en masa de judíos en Alemania desde el Holocausto.
Desde el ataque, Privorozki dijo que las autoridades de Halle asignaron una persona de contacto policial adicional para la comunidad, un aumento de uno a dos. Dijo que la policía ahora protege los entierros de miembros judíos.
“Ayer mismo hubo un correo electrónico en el buzón de la comunidad judía de Halle, que decía: ‘Lamentablemente, nuestros abuelos no resolvieron completamente el problema entre 1933 y 1945′.
“El remitente lo firmó con su nombre completo. Envié el correo electrónico directamente a la oficina del fiscal”, dijo Privorozki.
El líder de la comunidad judía dijo que “el antisemitismo no es sólo un problema de la AfD [Alternativa para Alemania]. Todas las partes están afectadas por el virus del antisemitismo. Es un gran problema que todos señalen con el dedo a los demás, pero se liberan de toda sospecha”. Por supuesto, la AfD tiene un gran problema con el antisemitismo y la voluntad de erradicarlo es menor que con otros partidos”.
Los líderes del partido anti-inmigrante AfD han restado importancia al recuerdo del Holocausto y han elogiado el papel de los soldados alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
Los miembros de otros partidos políticos de Alemania han sido objeto de críticas en 2019 por apoyar a los antisemitas iraníes y supuestamente por integrar la negación del Holocausto.
Algunos ejemplos elocuentes de escándalos de antisemitismo durante el último año, según los informes de los medios de comunicación alemanes y sus críticos, se desarrollaron dentro del Partido Verde alemán y el Partido Socialdemócrata.
El Partido Verde alemán se sumergió en su escándalo de antisemitismo más devastador en octubre, debido a que su vicepresidente incorporó a un político iraní de alto rango que niega el Holocausto y busca la destrucción del estado judío. La vicepresidenta del Bundestag del Partido Verde, Claudia Roth, saludó celosamente al presidente del parlamento ersatz de Irán, Ali Larijani, unas semanas después del atentado de Halle.
El islamista Larijani negó el Holocausto durante su discurso en Munich y llamó a la destrucción del estado judío.
Un diputado del Partido Verde de Alemania, que firmó una iniciativa antiisraelí del Partido Verde para etiquetar los productos judíos de los territorios en disputa en 2013, forma parte de la junta directiva de la Asociación Germano -Palestina – una organización que trafica con BDS y antisemitismo.
Niels Annen, secretario de estado en el ministerio de asuntos exteriores y diputado del Partido Social Demócrata, asistió y defendió la celebración de los 40 años de la revolución de la República Islámica de Irán en la embajada de Teherán en febrero. El régimen de Irán es el principal estado patrocinador del antisemitismo letal, la negación del Holocausto y el terrorismo.
Un estudio del gobierno federal del año 2017 dijo que el 40% de los alemanes mantienen una actitud antisemita moderna, es decir, el odio intenso al estado judío. El estudio reveló que casi 33 millones de alemanes de los 82 millones están contaminados por el antisemitismo contemporáneo.
Por: Benjamin Weinthal / En: Jpost / Traducción de Noticias de Israel
