Irán envía señales contradictorias a medida que las tensiones con EE.UU. disminuyen


Irán envió el jueves señales contradictorias, a medida que las tensiones con Estados Unidos parecieron disminuir, con el presidente Hassan Rouhani advirtiendo de una “respuesta muy peligrosa” si Estados Unidos comete “otro error” y un alto comandante prometiendo “una venganza más dura” por el asesinato de un alto general iraní.

Ambos bandos parecieron dar un paso atrás el miércoles después de que Irán lanzara una serie de misiles balísticos contra dos bases militares que albergaban tropas estadounidenses en Irak sin causar ninguna baja. Irán dijo que el ataque era una represalia por el ataque estadounidense que mató al general Qassem Soleimani, el arquitecto de su estrategia de seguridad regional, en Irak a principios de esta semana.

Rouhani dijo que el ataque a las bases era un acto legítimo de autodefensa según la Carta de las Naciones Unidas, pero advirtió que “si Estados Unidos comete otro error, recibirá una respuesta muy peligrosa”.

Además de lanzar el ataque con misiles, Irán también abandonó sus compromisos restantes en el marco del acuerdo nuclear de 2015, del que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se había apartado en mayo de 2018. Sin embargo, Rouhani dijo el jueves que Irán seguirá cooperando con los inspectores de la ONU.

Los altos mandos militares iraníes dieron un tono más desafiante.

Abdollah Araghi, miembro del Estado Mayor Conjunto de Irán, dijo que la Guardia Revolucionaria del país “impondrá una venganza más severa contra el enemigo en un futuro próximo”, según la agencia de noticias semioficial Tasnim.

Tasnim también citó al general Ali Fadavi, comandante en funciones de la Guardia, diciendo que el ataque con misiles fue “sólo una de las manifestaciones de nuestras capacidades”.

“Enviamos docenas de misiles al corazón de las bases de Estados Unidos en Irak y no pudieron hacer nada”, dijo.

El miércoles, Trump señaló que no tomaría represalias militares por el ataque a las bases. Eso despertó la esperanza de que el actual enfrentamiento, que llevó a los dos países al borde de una guerra total, pueda terminar.

Rouhani habló por teléfono el jueves con el primer ministro Boris Johnson, instando a Gran Bretaña a denunciar el asesinato de Soleimani.

Como jefe de la Fuerza Quds, Soleimani había movilizado a proxys armados en toda la región y se le culpó de ataques mortales contra los estadounidenses desde la invasión de Irak en 2003. En Irán, muchos lo ven como un héroe nacional que desempeñó un papel clave en la derrota del grupo del Estado Islámico y en la resistencia a la hegemonía occidental.

Sin los esfuerzos de Soleimani liderando las fuerzas en Siria e Irak contra el ISIS, “no tendrían paz y seguridad en Londres hoy”, Rouhani fue citado diciendo por el Vicepresidente Alireza Moezi, quien twitteó sobre la llamada con Johnson.

Downing Street confirmó la llamada, diciendo que Johnson pidió “el fin de las hostilidades” en el Golfo. Dijo que el Reino Unido mantiene el acuerdo nuclear y está instando a Irán a volver a un cumplimiento total.

Fuente: AP