El ataque con misiles contra bases que albergan a soldados estadounidenses en Irak fue "una bofetada en la cara" de Estados Unidos, afirmó el miércoles el el ayatolá Ali Jamenei.
"La noche pasada, se dio una bofetada en la cara" de los estadounidenses, expresó el líder en un discurso difundido por la televisión.
Jamenei manifestó que Estados Unidos pudo haber "cortado el brazo de Soleimani", pero advirtió que Irán responderá "cortando las piernas" de los estadounidenses en la región.
El líder supremo iraní agregó que Estados Unidos estaba tratando de eliminar a Hezbollah del Líbano en un intento por ayudar a Israel, pero señaló que la organización terrorista libanesa respaldada por Irán actúa como "nuestras manos y ojos" en la zona.
El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, sostuvo que la República Islámica no busca una escalada ni la guerra, sino que "se defenderá de cualquier agresión".
En declaraciones para la televisión iraní, Zarif indicó que el ataque con misiles de Teherán fue un acto de "legítima defensa".
Jamenei pidió que se vengue la muerte de Qasem Soleimani, el terrorista que estaba al frente de la fuerza Quds iraní, que fue eliminado el 3 de enero en un ataque estadounidense cerca del aeropuerto de Bagdad.
Su declaraciones llegan después de que hubiera pedido una "severa venganza" por la muerte del general.
El martes de madrugada Irán disparó varios misiles contra bases de Irak donde están estacionadas las tropas de Estados Unidos, indicaron responsables en Teherán y en Washington.
"Lo que importa es que la presencia corrupta de Estados Unidos en esta región tiene que terminar", añadió.
Fuente: Ynet y AFP
