Varios miles de personas, muchos de ellos judíos, se manifestaron en varias ciudades de Francia para protestar por la decisión de un tribunal de no juzgar a un hombre musulmán que confesó haber asesinado a su vecina judía mientras gritaba sobre Al´á.
La Plaza de la República en París se llenó de manifestantes por el fallo del mes pasado sobre el destino de Kobili Traore, un musulmán de 29 años. Mató brutalmente a Sarah Halimi en 2017.
Reafirmando un fallo anterior, la Corte de Apelaciones de París afirmó el mes pasado que Traore mató a Halimi porque era judía, pero citó evaluaciones psiquiátricas diciendo que su consumo de marihuana antes del incidente le provocó un “episodio delirante” que lo hizo no responsable legalmente de sus actos.
Varios miles de judíos marcharon en Marsella en protesta por el fallo, que los líderes de la judería francesa, incluyendo el paraguas del CRIF de las comunidades judías francesas, han sugerido que fue diseñado para evitar el escrutinio del antisemitismo musulmán.
La BNVCA, organismo de control de la comunidad judía, sostiene que prácticamente todas las agresiones antisemitas violentas en Francia son casos de “nuevo antisemitismo” – definido como crímenes de odio por personas cuyas familias inmigraron a Francia desde países musulmanes.
Pero en su informe de 2016, la Comisión Nacional Consultiva de Derechos Humanos de Francia, una agencia del gobierno, dijo que no tenía pruebas de que exista un nuevo antisemitismo.
“El antisemitismo no es el verdadero tabú en Francia, sólo lo es la identidad de los antisemitas”, dijo Georges Bensoussan, historiador judío, a Le Figaro la semana pasada sobre el caso.
En 2017 fue juzgado por discurso de odio por citar la afirmación de un escritor musulmán de que los árabes reciben el antisemitismo con su “leche materna”. Bensoussan fue finalmente absuelto en medio de una protesta.
Fuente: Israel Noticias
