Familiares de las víctimas israelíes de coronavirus: “Podría sucederle a cualquiera”

Los familiares de los cinco israelíes que han muerto por el coronavirus hasta ahora hablaron el miércoles, expresando su dolor e instando a otros a seguir las instrucciones oficiales para evitar la propagación de la enfermedad, según informó el Canal 13.


Orit, la hija de Moshe Orinstein, de 87 años, que murió el martes en Jerusalem, culpó de la muerte de su padre a las condiciones de la residencia de ancianos donde vivía, diciendo: “Mi padre pagó el precio de esta gestión”.

Dijo que el personal de la residencia se veía obligado a tratar a sus residentes “cuando no tienen medidas de protección” y “contaremos cada vez más muertos de esta residencia”.

El marido de Malka Keva, de 67 años, que también murió de un coronavirus el martes, dijo: “Cuando nos informaron que la estaban conectando a una infusión, le dije a mi hijo Moshiko que se había acabado”.

Debido a la cuarentena, dijo: “No pude despedirme de ella. Le envié mensajes de que tal vez si se despertaba, los leería”.

Iris Avraham, hija de Moshe Hillel, de 76 años, que murió el miércoles, dijo: “Mi padre se ha ido y mi madre está hospitalizada en el Tel HaShomer [Hospital], y no puede venir al funeral”.

“Este es el mensaje que quiero transmitir a todo el pueblo”, dijo, “si me pasara a mí, podría pasarle a cualquiera”.

“Por eso digo: quédate en casa, no cometas errores. Mantengan a sus familias a salvo, no vayan con los abuelos”, instó.

Yael Even, hija de Aryeh Even, un sobreviviente del Holocausto de 88 años que el viernes pasado se convirtió en el primer israelí en morir de un coronavirus, dijo: “Lo más frustrante fue que no pudimos tomar la mano de papá en sus últimos momentos. Lo vimos en cámara y sonrió”.

“Es muy triste que haya terminado así”, declaró.

Si Israel no ve una mejora inmediata en la tendencia del número de personas infectadas con el coronavirus, entonces el país no tendrá más remedio que implementar un cierre total incluso en los próximos días, advirtió el miércoles el Primer Ministro Benjamin Netanyahu, minutos después de que el número de israelíes enfermos subiera a 2.369, según el Ministerio de Salud.

Netanyahu añadió que el Ministerio de Defensa y el Mossad están trabajando juntos para adquirir el equipo médico necesario en el extranjero, así como considerando formas de que dicho equipo se fabrique en Israel. Añadió que en los próximos días se pondrá en marcha un plan para aliviar la tensión económica del público y las empresas israelíes.

Fuente: Algemeiner / Israel Noticias