Rabino Elie Abadie: "Hay más de 10 entierros por día en la comunidad judía de Nueva York"

Son días aciagos para los judíos de Nueva York: la Jevrá Kadishá está rebasada, pues hasta 12 personas de la comunidad mueren cada día a causa del covid-19. Sobre esto hablamos con el rabino y médico de aquella comunidad, Elie Abadie. 


Al menos 100 judíos neoyorquinos han muerto a consecuencia del covid-19, la plaga moderna que azota al mundo en la víspera de Pésaj. “Desafortunadamente, la comunidad judía de Nueva York ha sufrido y está sufriendo de ese virus y la enfermedad, hay mucha gente infectada y mucha gente, desafortunadamente, ya falleció.”

Así lo narra, vía telefónica, el rabino Elie Abadie, en entrevista exclusiva para Enlace Judío, quien atribuye el alto índice de contagios dentro de la comunidad a lo que, paradójicamente, suele ser signo de alegría y vitalidad.

“Desafortunadamente, yo creo que es porque la comunidad judía siempre tiene alegrías: bodas de mil personas, bar mitzvot de otras mil personas, la gente se une con su familia a Shabat, a Purim” y toda clase de eventos multitudinarios, muchos de los cuales tuvieron lugar antes de que la población fuera consciente de lo que estaba ocurriendo. De lo que estaba por ocurrir.

Ante la contingencia, y en sintonía con la mayor parte de las comunidades judías del mundo, incluida la de México, este será un Pésaj agridulce. Para la ocasión, “hemos dado órdenes muy específicas todos los rabinos y los doctores de la comunidad y también los oficiales de la ciudad, que este Pésaj cada quien lo tiene que festejar a solas en su casa. No se puede invitar a amigos ni a familia ni a los papás porque, desafortunadamente, esto los puede contagiar. Es para proteger a la gente de edad mayor.”

Al igual que en otras partes del mundo, algunos rezos se realizan a través de plataformas digitales que permiten celebrar reuniones virtuales. “Hay muchos lugares que están haciendo los rezos por vía de zoom y por vía de otras aplicaciones digitales pero no se puede hacer minyán, a menos que haya 10 personas en un lugar y eso lo pasen digitalmente, entonces otras personas pueden participar y contestar ‘amén’ o decir Kedushá, pero esa gente que está sola no puede decir Kaddish.”


Pese a las medidas tomadas por los líderes comunitarios, algunas personas son reacias a renunciar a sus costumbres. “Sabemos, si se puede decir, que hay minyanim clandestinos que se están haciendo, y las autoridades y muchos rabinos de la comunidad están en contra de eso porque eso va a poner a la gente en peligro”, nos cuenta Abadie.

“Se controla lo más que se puede y, lo demás, la gente hace lo que quiere y es una situación muy confusa para mucha gente pero hay que tener mucho cuidado porque todavía no se sabe mucho de ese virus, cada día cambian los factores. Antes decían que eso solamente se pegaba cuando uno estornuda o tose fuertemente, ahora dicen que no, que con hablar uno puede sacar ese virus de su boca, de sus pulmones y puede contagiar a otra persona. También estamos aprendiendo ahora que el virus se queda más tiempo sobre superficies o metales o de papel o cosas así. Entonces, cada día estamos aprendiendo cosas nuevas de ese virus.”

El también médico dice que incluso se comienza a saber más sobre cómo afecta el virus al cuerpo humano. “Al principio sabíamos que atacaba los pulmones, ahora hay un poco de evidencia de que ataca también las células rojas de la sangre y por eso la gente es un poco hipóxica, y también se está aprendiendo que tal vez ataque al poder coagulativo de la sangre, o sea, puede causar coágulos, y eso es lo que ataca al pulmón.”

Y si bien la enfermedad ha mantenido ocupados a los profesionales de la salud, no son estos los únicos que han llegado a ver rebasadas sus capacidades a consecuencia del covid-19:

“La Jevrá Kadishá tiene muchos problemas porque han tenido más de 10 a 12 muertos por día, que generalmente no los tienen, y están enterrando a la gente solos o con una persona nada más, de la familia, y otras veces han tenido que poner los cadáveres en un refrigerador porque no se puede hacer el mismo día.”

Para el rabino Abadie, hay algunos signos de luz en el horizonte, pues además de que varios tratamientos están siendo probados en pacientes infectados alrededor del mundo, y aunque la posibilidad de tener una vacuna no parece muy cercana, “parece que ya la tasa de infectados y de muertos está bajando un poco.”

Antes de despedirse desde su casa en Nueva York, Elie Abadie quiere aprovechar la ocasión y los medios para enviar un mensaje a la comunidad judía de México. Luego de decir Jag Sameaj, el rabino deseó que “como nuestros ancestros fueron salvados en el primer Pésaj, en Egipto, que nosotros también y todo el mundo sea salvado este Pésaj y que veamos nada más alegrías.”

Fuente: ©EnlaceJudío