AMIA: Encuentro virtual de la Orquesta Infantil con la familia Fiedotin


Más de 50 chicos de la Orquesta Infantil y Juvenil “Arnoldo Fiedotin” de AMIA, junto a sus familias, participaron de una merienda virtual que fue compartida a través de la plataforma Zoom y que tuvo como invitada especial a Rosi Fiedotin, quien desde los inicios es la donante del proyecto.

La actividad, coordinada por el área de Infancia, se realizó el miércoles 13 de mayo y tuvo como finalidad brindar a Rosi y a su familia una presentación musical a cargo de los integrantes de la orquesta para reconocer su valioso aporte. Además de expresarlo a través del arte, los participantes, que tienen entre 6 y 18 años, sorprendieron, al finalizar el show, con un cartel en el que se podía leer la frase “Gracias Rosi”.

En el encuentro estuvieron presentes la directora del Departamento de Programas Sociales Fanny Kohon, la coordinadora general del área de Infancia Corina Lang, el director de la Orquesta Rodrigo Gonzalez Jacob y los profesores que acompañan a los alumnos en su formación musical.

“Estamos felices con este proyecto. Nos llena de orgullo ver cómo crece la participación de los chicos en la orquesta. Gracias por confiar y por el apoyo que nos brindan”, agradeció Corina Lang a Rosi Fiedotin.

“Esto es un regalo increíble. Ustedes hacen un trabajo extraordinario. Con su música, están manteniendo vivo el espíritu y el nombre de Arnoldo Fiedotin. Gracias por lo que hacen”, expresó con gran emoción la donante. “Cuando finalice la cuarentena, voy a ir a visitarlos para agradecerles en persona”, agregó la donante.

La Orquesta Infantil y Juvenil es una iniciativa del área de Infancia del Departamento de Programas Sociales de AMIA, que busca promover a través de la música la cultura, la expresión artística y la inclusión social. Participan de ella 70 niños, niñas y adolescentes de la comunidad judía y de contextos cercanos a CABA, así como de zonas vulnerables de la ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires.

Ante la situación de aislamiento obligatorio, se suspendieron las clases presenciales y se adaptaron los ensayos al modo virtual. Para ello se dispuso que cada alumno y alumna podía retirar el instrumento en la sede de Uriburu 650 y tenerlo en su domicilio para avanzar con el curso.

Luego de un acompañamiento telefónico con las familias y de sus autorizaciones para que los alumnos y alumnas pudieran mantener los encuentros online, se desarrolló una planificación específica para cada uno en relación con su nivel y posibilidades, en la que se tuvo en cuenta tanto el acceso a herramientas tecnológicas como su situación personal.

De esta forma, se pudo dar continuidad al dictado de clases, de instrumento y de lenguaje musical, y a seguir conectados a través de la música, los compañeros y los profesores a pesar de la distancia física que debemos mantener.