#DAIA85años: La década del ´50, trabas inmigratorias y antisemitismo



En el plano de la política migratoria, la actitud hacia los judíos se mantenía estable respecto de los criterios restrictivos. Las investigaciones sobre esta materia han arrojado en forma documentada, expresiones oficiales que calificaban a la judía como una “inmigración viciosa e inútil” o “mala inmigración”. En el mismo sentido, se encuentra la triste advertencia que el entonces Director de Migraciones, Santiago Peralta, hizo a los asesores y representantes de organizaciones de ayuda al inmigrante: “En cuanto propongan a un judío se terminó la vinculación con la Dirección y el reconocimiento de que forman parte”, sentenció. Según la concepción de la época, los judíos, sin importar su procedencia, eran considerados poco asimilables e “indeseables”.