LA GUERRA DE LOS BALONES EN GAZA


Por Flavio Goldvaser,especial para Comunidades Plus

En este artículo trataremos de analizar la lógica de la confrontación que sacude al territorio autónomo de Gaza desde el punto de vista de Hamas y que podría llevar a una confrontación militar con Israel. Que realmente ninguna de las parte quiere pero que podría estallar por un error de cálculo más allá de la “tregua “ firmada

 Agosto del 2020 vio un deterioro creciente de la situación de seguridad de la región con una tensión  en aumento que no da tregua y parece no detenerse entre Israel y el grupo terrorista Hamas que controla la franja de Gaza. Todo esto a pesar de los intentos de mediación de Egipto, la Comunidad Europea y Qatar, la violencia y los ataques se sucedieron sin fin. Se han centrándo en el lanzamiento de balones conteniendo dispositivos remotos explosivos e incendiarios que han quemado bosques, áreas de cultivos y han caído en las cercanías de jardines de infantes de las aldeas judías. Frente a estos ataques el ejercito de Israel respondió con ataques de tanques y aviones de combate sobre posiciones e infraestructura del grupo Hamas. Como respuesta, este grupo escaló la situación con al menos 30 ataques de misiles sobre ciudades sureñas israelíes incluyendo a Sderot.

Mientras tanto  Israel cerro los pasos fronterizos de Kerem Shalom para la transferencias de productos, combustibles  y energía eléctrica. Exceptuando de este embargo a los productos medicinales, lo ha provocado gran escases de todo tipo de insumos para la industria y comercio. Se han provocado a si mismo apagones eléctricos frecuentes debido a la falta de insumos para mantener funcionando la planta eléctrica de Gaza. Como medida punitiva adicional Israel mantuvo cerrada la zona exclusiva de pesca de la región autónoma lo que agravó la crisis humanitaria, sumando a este factor la explosión de casos de Covid-19 que se está comenzando a expandir por el territorio.

Mientras los responsables políticos de Hamas expresan a los mediadores internacionales a puertas cerradas que ellos no tienen ningún interés en una escalada militar, Ismail Haniyeh el Jefe Político de Hamas  expresaba que el incremento de las tensiones se debe al cerco que el enemigo ha impuesto a Gaza. Se ha acusando a Israel de no honrar los acuerdos alcanzados a través de la mediación de Egipto y Qatar, agregando que la situación esta a punto de colapso y agregando por otro lado que si sus demandas no son alcanzadas están dispuestos a abrir un nuevo frente de guerra.

 Aseguran que no bajarán el nivel de presión sobre su enemigo pero que mantendrán este nivel de actividad constante para convencer a Israel de dar marcha atrás en todas las medidas restrictivas y aliviar el cerco que afecta al territorio que ellos manejan y que ha deteriorado la vida de los habitantes, agregando que Israel debe entender que esta presión no producirá un cambio político retrotrayéndola al periodo anterior al 2007, donde la Autoridad Nacional Palestina dominaba el enclave. Así mismo las fuentes consultadas dicen que la presión que ellos ejercen contra Israel puede continuar indefinidamente, porque Israel  entiende que para erradicar los peligros provenientes de Gaza en forma definitiva deberán ocupar militarmente y permanecer por un periodo de tiempo indefinido en el enclave. Ya que no hay ningún país árabe o entidad internacional que quiera cargar con la administración del territorio y por eso deberán tener en consideración el costo de vidas humanas, económico y el desgaste político de una aventura militar de esa envergadura. Agregando que una vez que las fuerzas militares se retiren del enclave, Gaza volverá a ser una amenaza contra la seguridad del país. También consideran que Israel no quiere invadir y destruir el gobierno de Hamas para no descuidar el frente norte donde tienen un enemigo más poderoso que es Hezbollah en el Libano y las fuerzas iraníes que se encuentran en Siria, además para no poner en peligro los acuerdos de paz bilaterales con otros países árabes que en caso de una masacre palestina correrían riesgos de ser revertidos.

Estas mismas fuentes aseguran que el nivel de violencia que mantienen la realizan para evitar ser presionados por los mediadores internacionales y que así escuchen las demandas israelíes.

 A diferencia de estas declaraciones los grupos más radicalizados expresaban su intención de abrir un frente sin medir las consecuencias como lo han expresado Khalil al-Haya miembro del ala política de Hamas que en un reportaje para el periódico Al-Aqsa el 19 de Agosto decía que sus fuerzas están preparadas con sus armas apuntando a Israel y que ninguna amenaza de destrucción, muerte o ataques los detendrán y que responderán con fuerza a cualquier provocación.

Mientras Khader Habib jefe del grupo Jihad Islámica sostiene que su grupo de ninguna manera quiere tranquilidad con Israel y que en caso de hostilidades ellos no se sentarán pasivamente.

Otro de los grupos armados de Gaza que expresó su predisposición para la confrontación fueron las Unidades Unidas Jihadistas de la Espada quienes demandaron una inmediata e incondicional rendición de Israel para terminar con el sitio a través de sus canales privados de Telegram, anunciando que intensificarán el lanzamiento de balones incendiarios y dispositivos explosivos.

 Para concluir debemos decir que a pesar del hecho que ninguna de las partes intervinientes en el conflicto quiere una escalada militar, las fuerzas palestinas están jugando al borde del abismo. Cualquier consideración incorrecta o algún ataque que produzca victimas civiles puede lanzar una guerra o una confrontación militar abierta, especialmente dado el nivel de amenazas públicas de cada una de las partes. Aunque los canales de dialogo siguen abiertos y los mediadores seguirán tratando de alcanzar algún tipo de acuerdo con concesiones por parte de Israel. Hamas y los demás movimientos no quieren que sus adeptos perciban debilidad y que se han rendido a las demandas de sus jurados enemigos. Es por esto que Egipto ha optado por retirarse momentáneamente de las negociaciones y los mediadores qataries demuestran su frustración retirándose una y otra vez del enclave, amenazando con suspender los envíos de dólares para pagar a los empleados de la administración publica del enclave y suspender toda financiación a Hamas. Es por eso que estamos observando una situación que continua fluida y que hemos vivido más de una vez a lo largo de los años. Debido a la imposibilidad e impotencia del liderazgo palestino de ponerse de acuerdo estableciendo un gobierno unificado y democrático que pueda sentarse a negociar con Israel un acuerdo de paz global y definitivo. En vez de apostar una y otra vez a la violencia como medio para resolver el conflicto y que nunca les dio resultado dejando cada vez más solos los deseos aspiracionales de autogobierno.