Otra explosión en Líbano despierta más sospechas sobre Hezbola

 Un mes y medio después de la gigantesca explosión en el puerto de Beirut en la que murieron unas 200 personas y más de 6.000 resultaron heridas, se registró este martes otra potente explosión en la localidad Ein Kana en el sur libanés. No se acercó siquiera a la envergadura de la anterior, pero fue sí de gran potencia. Diversas fuentes periodísticas libanesas y extranjeras lo atribuyeron a algo que habría ocurrido en un depósito de armas de la organización chiita pro-iraní Hezbola.

Por su parte Hezbola alega que la explosión ocurrió en el centro de la asociación “Generaciones de Paz”, que se dedica a la retirada de minas y recolección de restos de proyectiles disparados en guerra que quedaron en el terreno.

 

En primera instancia hubo publicaciones alegando que la explosión había sido en una estación de nafta, confirmándose luego que no hay ninguna en esa zona puntual.La agencia Reuters  publicó que el estallido había sido en un depósito de armas de la organización chiita y ello fue confirmado, entre otros, por el  periodista libanés Salem Zahran de “Al Jumhuría”.

 

Abu Ali Express reveló en Telegram un tuit del 7 de agosto de un periodista libanés que estuvo preso en manos de Hezbola y que al lograr salir emigró a Noruega. En el tuit escribió que la unidad de ingenieros de Hezbola se dedica a la producción de cargas explosivas dentro de casas particulares en Ein Kana en el sur libanés, precisamente la localidad en la que se produjo la explosión. Según este periodista. Hezbola tiene en el lugar enormes cantidades de explosivos.

Según Abu Ali, en las últimas horas el periodista en cuestión ha estado recibiendo numerosas amenazas de muerte. Asegura que la información que publicó en su momento le llegó de “una persona preocupada”.

 

 

Armas en medio de civiles

 

Ello no debería sorprender en absoluto ya que es sabido que la estrategia de Hezbola es colocar su arsenal en aldeas civiles, en medio de la población, incluyendo los misiles que tiene listos para disparar hacia Israel. No se trata de una nueva práctica  sino de una línea que quedó en claro también en la guerra del 2006.

 

Recientemente entrevistamos al Brigadier General (Ret) Asaf Orion, experto en Hezbola y la situación libanesa en el Instituto de Estudios de Seguridad Nacional de Tel Aviv y en el Washington Institute, , quien nos habló explícitamente sobre este punto. Se trata de  un aspecto muy problemático y preocupante del conflicto entre Israel y Hezbola en el que la organización pro iraní buscar por todos los medios exponer a la población civil libanesa para complicar la eventual respuesta israelí a un ataque que lance contra la población civil del Estado judío.

Asaf Orion del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional (INSS)

 

Estos fueron sus conceptos:

 

Hay unas 300 aldeas chiitas preparadas plenamente como instalaciones militares de cara a la próxima guerra.  Allí instalaron sus cohetes y misiles. Los de corto alcance están ubicados cerca de la frontera con Israel y los de 700 kms de alcance pueden ser emplazados también en el norte de Líbano. En Beirut ya se sabe que están las comandancias.

P: ¿No sólo en la Dahia, la zona chiita controlada por Hezbola?

R: No, no sólo en la Dahia. Hezbola tiene una estrategia clara: preparar la guerra en zonas pobladas.

P: Este es uno de los problemas centrales.

R: Por supuesto. El Derecho Internacional, en lo referente a normas de combate., se ocupa constantemente de distinguir entre civiles y militares, para que esté claro. Pero toda la idea de Hezbola y de Irán es precisamente encargarse de que no se pueda distinguir entre ambos . Por eso procuran tener escudos humanosen escuelas, clínicas, hospitales, mezquitas, casas particulares, granjas, talleres…todo en medio de los civiles. Esperan que Israel se controle y no responda disparando a civiles. Israel lo tiene bien claro, pero su dilema es que si no ataca donde están los misiles, serán sus civiles los atacados. Hará sin duda lo posible para avisar a tiempo , pero si los misiles de Hezbola están emplazados entre los civiles, si Israel tiene que atacarlos, estará atacando de hecho blancos militares. El dilema es entre sus hijos y los hijos de otros. Es Hezbola quien eligió el campo de batalla, al ubicar así sus misiles, entre sus propios civiles. 


Por Ana Jerozolimski
Fuente: Semanario Hebreo Jai