Sorprendentes reacciones a los acuerdos de paz en Oriente Medio

El 13 de agosto de este año saltó la bomba informativa del año y quién sabe si no de la década. Una bomba con mucho contenido pacifista y esperanzador. En esta fecha, se anunció un histórico acuerdo de paz entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos que garantizaba la total normalización de las relaciones diplomáticas y comerciales entre ambos países.

POR  ISAAC LEVY EN EXCLUSIVA PARA ENLACE JUDÍO

Sin duda, es una noticia de mucho alcance y que ha sido aplaudida en muchos países del mundo y también en distintos países árabes o con mayoría musulmana.

Como residente en España, me ha llamado la atención la cobertura mediática que se ha hecho desde los medios de comunicación españoles en general de este tema. Así como muchas portadas de medios de países del Golfo y de otros países han expresado su satisfacción por el acuerdo, aquí en España las reacciones de medios y de políticos han sido diferentes.

Incluso el eminente profesor palestino Mohammed Dajani ha elogiado el acuerdo de paz entre Israel y los Emitatos Árabes Unidos y ha dicho que puede ser muy beneficioso para el pueblo palestino a largo plazo. Ha criticado duramente el rechazo de la clase dirigente palestina a dicho acuerdo. De hecho, una buena parte del mundo árabe o musulmán ha visto con buenos ojos este acuerdo a excepción de Turquía, Irán y la Autoridad Palestina. Por ese motivo, ha sido indignante poder leer artículos publicados en España por Jordi Joan Baños para el prestigioso diario La Vanguardia o por Eugenio García Gascón para el diario.es (entre otros muchos) que se alinean con las tesis más extremistas y critican abiertamente el acuerdo de paz, diciendo que es muy negativo para las aspiraciones soberanistas palestinas y añadiendo que este acuerdo está basado en intercambios armamentísticos y que sólo obedece a los intereses personales de Trump y Netanyahu para sus aspiraciones electorales. Aluden que el pacto es una farsa, en lugar de elogiarlo cuando además siempre se han manifestado supuestamente a favor de una paz regional en la región. Tampoco se ha comentado con suficiente cobertura aquí en España que este acuerdo puede provocar otros acuerdos de paz de Israel con otros países como Bahréin, Arabia Saudita o Marruecos entre otros.

Ayer se anunció que Serbia iba a trasladar su embajada de Israel a Jerusalem y que Kosovo será el primer país europeo con mayoría musulmana en establecer relaciones diplomáticas con Israel. Pues para la mayoría de la prensa española, todo ha sido una imposición de la administración de Trump y que sólo obedece a intereses económicos.

La verdad es que los medios de comunicación españoles en general tienden a amplificar y exagerar al máximo las malas prácticas del ejército de Israel (que efectivamente existen) y a minimizar totalmente las viles acciones premeditadas de las organizaciones terroristas palestinas. Esto provoca que la sociedad española en su conjunto tenga una opinión muy tergiversada y una hostilidad manifiesta hacia Israel, único estado judío del planeta. Y como se ha comprobado y hasta aprobado en muchos parlamentos del mundo, el antisionismo es una forma contemporánea de antisemitismo. Y si a esto añadimos el desprecio y la infamia de algunos periodistas a los acuerdos de paz que firma Israel, hace que el cóctel de odio sea explosivo.

Es paradójico comprobar cómo algunos países árabes o musulmanes están cambiando su perspectiva hacia Israel en plan positivo y que aquí en España y otros países europeos sigan demonizando a Israel excusándose en su rechazo a Trump o Netanyahu. Cambiar el sesgado enfoque de los medios de comunicación españoles es una tarea difícil pero no imposible. Puede representar un reto muy bonito y necesario para disminuir los prejuicios existentes contra Israel y los judíos.


Fuente: ©EnlaceJudío