Salida de Israel del confinamiento podría tomar hasta 1 año: Netanyahu

El primer ministro Benjamín Netanyahu lanzó una aguda advertencia este miércoles: el confinamiento nacional en vigor por COVID-19 en Israel, que ha limitado drásticamente la vida pública, cerrado el sistema educativo y muchos negocios, podría durar meses o incluso hasta un año.

El gabinete del coronavirus se reunió este día para discutir el establecimiento de objetivos e indicadores para una salida gradual del confinamiento, así como el progreso en vacunas y la compra y uso de pruebas rápidas de COVID-19, de acuerdo con el sitio The Times of Israel.

En filtraciones de la reunión publicadas por medios israelíes, Netanyahu presuntamente habría dicho ante los ministros de su gobierno enfocados en la lucha contra el coronavirus que “nuestra estrategia de salida [del confinamiento] será lenta esta vez y podría llevarse a cabo durante medio año o un año”.

El gobierno ha sido criticado por una salida muy rápida del primer breve confinamiento durante la pasada primavera y por no volver a reimponer las restricciones cuando las tasas de infección comenzaron a aumentar en julio.

Ante el acelerado rumbo que tomó la pandemia a inicios de este mes, el 18 de septiembre se inició un confinamiento nacional de tres semanas, el cual fue endurecido aún más el viernes pasado, en medio de temores de que pueda extender más allá de lo previsto originalmente.

Durante la junta, Netanyahu habría tenido un encontronazo con el ministro de Defensa, Benny Gantz, mientras se discutía una severa restricción que podría ser aplicada a la población.

El mandatario habría planteado la posibilidad de reducir la distancia de 1 kilómetro que actualmente le es permitido a los ciudadanos en todo el país como distancia límite para salir de sus hogares, a solo 200 metros.

Gantz habría protestado ante dicha medida: “Estamos enloqueciendo a la gente”, en referencia a los constantes cambios en las políticas del gobierno.

Netanyahu presuntamente respondió a gritos: “A mi no me vas a decir lo que haremos o no haremos, esta es una reunión y quiero esta discusión. En marzo-abril actualizamos los planes todo el tiempo”.

A diferencia de Netanyahu, el ministro de Finanzas, Israel Katz, habría pedido una flexibilización del confinamiento y la reapertura de las empresas que no tienen horario de visitas públicas inmediatamente después de la fiesta de Sucot, que culmina el 9 de octubre.

El plan de Katz también pediría la reapertura inmediata de la educación prescolar y los grados más jóvenes de las escuelas primarias para permitir que los padres regresen al trabajo.

Durante la reunión, los ministros habrían recibido informes de que el cierre hasta ahora no se ha implementado según lo planeado, y las cifras de tráfico muestran que muchos ciudadanos aparentemente no están cumpliendo con el requisito de quedarse en casa.

Comisionado del gobierno para coronavirus, Ronni Gamzu, sugirió aumentar las multas para aquellos que no usen cubrebocas o abran negocios que se supone deben estar cerrados. Gamzu instó a duplicar o, en algunos casos, multiplicar aún más el tamaño de las multas como medida disuasiva.

Netanyahu también habría dado instrucciones al Ministerio de Salud para preparar el sistema hospitalario con el fin de que tenga la capacidad de atender hasta 5,000 pacientes graves de COVID-19 para el próximo invierno.

Según el Canal 12, el primer ministro querría tener a los hospitales preparados para tratar hasta 1,500 pacientes graves de inmediato, 3,200 para mediados de octubre y la cifra total de 5,000 para noviembre.

Si bien los funcionarios de salud indicaron en meses anteriores el límite de 800 pacientes graves como el máximo que podría manejar el sistema de salud, los hospitales han estado expandiendo constantemente sus salas de coronavirus y capacitando al personal para prepararse para números más altos.

Por su parte, el Canal 13 reportó que los pacientes graves de COVID-19 que terminan por morir, fallecen más rápido que en la primera ola de COVID-19. En ese entonces, la duración promedio de la hospitalización previa a la muerte fue de 15 días, pero ahora es de 11 días, según el reporte, que citó datos del Consejo de Seguridad Nacional.



Fuente: ©EnlaceJudío