Identifican a adolescente muerto en persecución policial

 El adolescente que murió en un accidente durante una persecución policial en Samaria el lunes ha sido identificado como Ahuvya Sandak, un residente de 19 años de Bat Ayin.

El incidente ocurrió en las proximidades de Kojav HaShajar, en el distrito de Binyamin de Samaria, justo al oeste del Valle del Jordán, cuando los agentes de policía intentaron detener a un grupo de jóvenes israelíes sospechosos de arrojar piedras a vehículos árabes en la zona.

Cuando los sospechosos huyeron, los agentes de policía encubiertos los persiguieron en una persecución vehicular. Durante la persecución, el conductor del coche de los sospechosos perdió el control y el vehículo se salió de la carretera.

Varias personas resultaron heridas en el choque, entre ellas un joven que fue declarado muerto en el lugar. Los sospechosos heridos fueron evacuados al hospital mientras estaban esposados.

La policía del distrito de Judea y Samaria declaró: “a raíz de un informe recibido en la comisaría sobre el lanzamiento de piedras desde un vehículo israelí a un vehículo palestino en el cruce de Mijmash, un equipo de detectives que se encontraba en el camino y en las cercanías identificó el vehículo que lanzó las piedras y le ordenó que se detuviera”.

“El conductor del vehículo inició una salvaje persecución a pesar de la orden de la policía de detenerse, continuó huyendo con el vehículo de los detectives siguiéndolo. Cerca del cruce de Rimonim, el vehículo se volcó y como resultado del vuelco, cuatro de los ocupantes del vehículo resultaron ligeramente heridos y fueron evacuados al hospital, donde un pasajero fue declarado muerto”.

El director general de Honenu, Shmuel Medad, respondió al accidente: “La sangre está en manos de los comandantes de la zona de Judea y Samaria, que permiten que se derrame la sangre de nuestros mejores hijos. Este horror debería hacer temblar a la Policía de Israel y al Ministerio de Seguridad Interior. Y también para todos los escalones que guían tal comportamiento asesino y asignan enormes presupuestos para ello. La tierra no se debería cubrir con su sangre!”.


Fuente: Arutz Sheva