Actual ola de COVID-19 en Israel podría ser peor que las anteriores, advierten desde hospitales

Directivos médicos de hospitales de Israel advirtieron este lunes que estaban viendo señales de que Israel está entrando en la peor ola de la pandemia de coronavirus hasta el momento.

“Estamos en el comienzo de una ola muy seria”, dijo el Dr. Pierre Singer, jefe de cuidados intensivos del Centro Médico Beilinson de la ciudad de Petaj Tikva, al Canal 13 israelí, recogió The Times of Israel.

Dijo que los hospitales estaban viendo “casos más jóvenes”, incluidos pacientes de unos 30 años. “Veo familias enteras infectadas. La gente no ha entendido que esta enfermedad es contagiosa y peligrosa. No ha terminado”, enfatizó Singer.

Por su parte, el Dr. Salman Zarka, director del Centro Médico Ziv de la ciudad de Safed, dijo que la enfermedad estaba “golpeando de nuevo, más que en las olas anteriores”.

“Los pacientes están llegando al hospital en estado muy grave… Todavía tenemos unos meses en los que debemos cumplir las reglas… Es una pena, tan innecesario enfermar ahora, que estamos viendo la luz al final del túnel”, señaló, en alusión a la llegada y aplicación de la vacuna contra COVID-19 en Israel.

Mientras que el Dr. Shlomi Codish, director del Centro Médico Soroka de Be’er Sheba, también dijo que su hospital estaba experimentando un “aumento pronunciado” de nuevos pacientes.

“El aumento es más pronunciado que durante la segunda ola y esperamos que si continúa de esta manera estaremos en un estado mucho más severo al final de esta ola”, dijo. “Los pacientes son jóvenes como lo eran en la segunda ola y en estado muy grave, y mientras esto continúe, lamentablemente irá acompañado de una importante morbilidad y mortalidad”.

Según datos de este lunes del Ministerio de Salud de Israel, 1,345 personas están hospitalizadas derivado de complicaciones por COVID-19, un aumento de casi 300 pacientes desde el jueves.

La dependencia dijo que 772 personas están en estado grave, 179 de ellos intubados a ventilación mecánica. Durante el apogeo de la segunda ola a principios de octubre, los casos graves alcanzaron un máximo de 900.

El reciente aumento de nuevos contagios ha ido acompañado de un aumento de las muertes, y el ministerio informó 190 muertes por coronavirus durante la semana pasada. Desde que comenzó la pandemia, 3,445 israelíes han muerto a causa del COVID-19.

Israel ha registrado 448,173 casos acumulados de contagio, de los que 53,912 casos están activos. El domingo se registraron un total de 7,061 nuevos casos, mientras que este lunes la cifra alcanzó al menos 5,205.

Israel impuso la semana pasada un tercer confinamiento nacional para frenar la propagación del virus, si bien sin el rigor del aplicado en septiembre pasado. Aunque, debido a que los contagios no cesan, desde el gobierno algunos funcionarios han instado a endurecerlo con el fin de poder reducir las infecciones.

Según el propio Canal 13, a los ministros del gobierno se les habría dicho que si no se aplica un confinamiento más estricto en los próximos días, esto podría llevar jornadas con más de 10,000 nuevos contagios, y entre 500 y 1,000 muertes más.

Este lunes, el primer ministro Benjamín Netanyahu dijo a los ministros de su gabinete de gobierno que se volverán a reunir en 48 horas para decidir si se endurece el confinamiento.

Netanyahu afirmó que, junto con la campaña de vacunación masiva que sigue su curso, restricciones durante un corto período serán suficientes para permitir frenar los contagios y comenzar con un proceso de reapertura económica de nuevo.

Sin embargo, habría oposición dentro del gabinete a algunas posibles medidas de confinamiento, en particular el cierre del sistema educativo, una medida que el ministro de Defensa, Benny Gantz, presuntamente no aceptaría.

Según reportes, el martes está programada una reunión del panel central de ministros encargados de formular una política sobre la gestión del coronavirus virus para decidir el cierre total del sistema educativo. Solo el gabinete completo puede dar la aprobación final a las órdenes de confinamiento.

Las restricciones actuales cerraron las actividades comerciales no esenciales, pero dejaron en gran medida el sistema educativo y muchos lugares de trabajo aún en funcionamiento.


Fuente: ©EnlaceJudío