El Rav Dr. Abraham Twerski ZL nació en USA el 6 de Octubre de 1930 y falleció el 31 de Enero de 2021 en Yerushalaim. Sus años fueron 90, su vida….mucho más.
Supo desde muy joven articular su vocación rabÃnica con el oficio de psiquiatra, de autor prolÃfico, de eximio conferencista, de docente y mentor sabio, promotor de la creación de instituciones destinadas tanto a profesionales de la salud mental como a pacientes. Fue Director de PsiquiatrÃa del Hospital St. Francis, en Pittsburg, USA, también fundador del centro Shaar Hatikvah para rehabilitación de presos en Israel.
Y más aún, el Rav siempre mostraba sensibilidad por el dolor ajeno, empatÃa por los que sufrÃan, sentido del humor, y por sobre todo una intensa Emunah (fe) con Simja (alegrÃa + armonÃa).
Escribió y publicó más de cien libros, aunque el Rav sostenÃa que él escribió “solo un libro, con 100 tÃtulos diferentes”. Y es asÃ: Tora y salud mental son la temática de su prolÃfica obra.
No soy biógrafo del Rav. Un dÃa, hace 20 años, lo conocà en USA. Y ese encuentro es para siempre. Recibà del Rav mucho más de lo que yo pueda dar el resto de mis dÃas: el compromiso del oficio para asistir quienes sufren, ser mejor persona y mejor Iehudi.
Ayer fue su levaia (entierro) en Yerushalaim. El Rav pidió que no hubiese discursos, homenajes, nada de palabras lustrosas. Solo que canten un “nigun” (melodÃa del último párrafo del Salmo 28 “Hoshia et amecha”) que el Rav hizo popular allá por 1960, y luego adoptado por miles de Iehudim.
Y asà lo haré yo ahora, Hoshia et amecha!
Hasta siempre Rav!
J. Weil
Y más aún, el Rav siempre mostraba sensibilidad por el dolor ajeno, empatÃa por los que sufrÃan, sentido del humor, y por sobre todo una intensa Emunah (fe) con Simja (alegrÃa + armonÃa).
Escribió y publicó más de cien libros, aunque el Rav sostenÃa que él escribió “solo un libro, con 100 tÃtulos diferentes”. Y es asÃ: Tora y salud mental son la temática de su prolÃfica obra.
No soy biógrafo del Rav. Un dÃa, hace 20 años, lo conocà en USA. Y ese encuentro es para siempre. Recibà del Rav mucho más de lo que yo pueda dar el resto de mis dÃas: el compromiso del oficio para asistir quienes sufren, ser mejor persona y mejor Iehudi.
Ayer fue su levaia (entierro) en Yerushalaim. El Rav pidió que no hubiese discursos, homenajes, nada de palabras lustrosas. Solo que canten un “nigun” (melodÃa del último párrafo del Salmo 28 “Hoshia et amecha”) que el Rav hizo popular allá por 1960, y luego adoptado por miles de Iehudim.
Y asà lo haré yo ahora, Hoshia et amecha!
Hasta siempre Rav!
J. Weil