Shalom Sivan, soy el Dr. Naftali Gross. Nosotros nos encontramos en la vÃspera de la Fiesta de la Libertad, vÃspera de la salida de Egipto, y es asà como verdaderamente me siento en las últimas horas. Este es mi último turno en el departamento de corona del Hospital Shaarei Tzedek . Los últimos enfermos han sido dados de alta. Nosotros cerramos el departamento, quien lo hubiera podido creer. Baruj Hashem.
En el último año hemos vivido en un planeta lejano, alejados de cualquier cosa que ustedes podrÃan imaginarse allà afuera. En primer lugar, los apreciados enfermos y sus familias-quienes simple y llanamente lucharon por respirar y vivir. Pero la dificultad fue grande para todos, desde los jefes de departamento y hasta el último de los voluntarios. A veces una tragedia le seguÃa a otra y los éxitos no alcanzaban ocultar el sentimiento de pérdida y agonÃa. Como en la oscuridad de Egipto. Me cuesta volver a los momentos en que dijimos el Vidui y cubrimos con un talit a algún fallecido del cual su familia no pudo despedirse…
Cuando la Torá describe la esclavitud de Egipto, ella la ilumina con pequeños actos de bondad: la preocupación de Miriam por el futuro del pueblo, la valentÃa de la parteras, la misericordia de Moshe por el débil-estos son puntos de luz que iluminaron la gran oscuridad. Mirando hacia atrás, también en la gran oscuridad que nosotros experimentamos distingo momentos como aquellos: una taza de té con algún enfermo, una palabra de aliento, un paquete enviado desde afuera con cosas sabrosas y una carta de agradecimiento.
No sé por qué se ha decretado que nuestra generación tuviera que luchar asÃ, pero sé que juntos escribimos un capÃtulo de la Historia. Aun contaremos a nuestros nietos sobre la época difÃcil y también sobre la brillante y asombrosa salida de Israel desde la oscuridad hacia la luz, y más aun con tal sincronización.
El Rav Kook escribió que la salida de Egipto no ha terminado, que siempre hay que seguir: ‘la salida de Egipto servirá de testimonio , para siempre, como la primavera del mundo entero’. Yo salgo del departamento, respiro profundamente y con ello siento que ha llegado la primavera”.