Encuesta: un 87% de judíos latinos considera seguro vivir en América Latina

 El Congreso Judío Latinoamericano realizó un estudio a través de la consultora Poliarquía. Datos sobre antisemitismo, asimilación e interacción con otros colectivos en comunidades judías de 16 países del continente.

A través de la consultora argentina Poliarquía, el Congreso Judío Latinoamericano (CJL) realizó una encuesta a referentes de comunidades judías de América Latina en la cual se consolidó una percepción ampliamente mayoritaria sobre la seguridad de vivir como judío en la región.

Sobre 304 referentes comunitarios de 16 países, el 87% respondió que considera seguro desarrollar una vida judía en su país, a pesar de que existen “algunos actos antisemitas aislados”. De hecho, el antisemitismo es un motivo de preocupación que se duplicó en relación a la primera vez que el CJL realizó esta encuesta en el año 2017.

Sin embargo, el principal factor que preocupa a los encuestados es la asimilación y la reducción de la población judía, según lo que respondió un 52% de los referentes comunitarios que participó del estudio.

El 85% considera que las instituciones comunitarias deben trabajar contra cualquier tipo de discriminación. Y del estudio se desprende la necesidad de profundizar vínculos con otros colectivos: un 78% de los encuestados considera necesario mantener un vínculo cercano con la comunidad musulmana y un 70% cree lo propio en relación al colectivo LGBT.

Respecto al vínculo de las comunidades judías latinoamericanas con Israel, un 63% cree que el antisemitismo aumentó en su país de origen a partir de los enfrentamientos entre Israel y Hamás en mayo de este año. El 40% confía en que el nuevo gobierno israelí favorecerá a la llegada de un acuerdo con los palestinos, y el 76% está a favor de la implementación de un espacio de rezo mixto en el Muro de los Lamentos, un tema de disputa entre diferentes corrientes judías en Israel.

“Conocer con métodos precisos y rigurosos la visión y preocupaciones de estos líderes de opinión nos permite trabajar mejor por las comunidades judías de toda la región”, explicó Claudio Epelman, director ejecutivo del CJL, quien resaltó que las divisiones internas comunitarias dejaron de ser la principal preocupación de los encuestados como había sucedido en ediciones anteriores. “La pandemia nos dejó enseñanzas, nos obligó y ayudó a comunicarnos, a entendernos mejor y saldar diferencias”, reflexionó Epelman.


Fuente: Ynet