El incidente ocurrió hace un año, durante la Operación Guardián de las Murallas, y fue filmado por otro árabe que subió la foto a las redes sociales mediante TikTok; posteriormente fue vista muchas veces.
Tras el ataque, los árabes implicados huyeron del lugar; la Policía de Fronteras los persiguió y detuvo a dos de ellos. Más tarde, ese mismo día, el árabe que perpetró el ataque fue capturado en la casa de su abuela en el barrio de Issawiya, al este de Jerusalén.
Según un informe de Kan News, el árabe fue declarado culpable y llegó a un acuerdo de culpabilidad, admitiendo haber causado daños corporales graves y tener motivaciones nacionalistas. También pagará 18.000 NIS a la víctima del ataque.
“El acusado perpetró este ataque durante un periodo de gran tensión y específicamente en la ciudad de Jerusalén, durante la Operación Guardián de los Muros”, declaró el juez Rafi Carmel. “El ataque fue filmado y difundido a través de TikTok, lo que solo sirvió para avivar las llamas, haciendo que el incidente sea de naturaleza mucho más grave”.
Fuente: Israel Noticias
