El líder del partido Hatzionut Hadatit, Betzalel Smotrich, envió este lunes una solicitud al presidente de la Knéset, Mickey Levy, para que celebre una sesión plenaria especial después de la festividad de Pésaj la próxima semana con el fin de disolver la Knéset, informó The Times of Israel.
La solicitud del legislador de extrema derecha se produjo después de la retirada temporal del partido islamista Ra’am del gobierno y el parlamento, lo que dejó a la asediada coalición en minoría en la Knéset.
“Como probablemente sepa muy bien, después de la retirada de sus socios del partido Ra’am de la coalición, el gobierno y la coalición no tienen mayoría”, escribió Smotrich.
“La situación actual en la que el gobierno es de hecho un gobierno minoritario que no tiene una mayoría en la Knéset daña gravemente la democracia y, como resultado, también la confianza pública”.
Smotrich agregó que debido a la situación actual, “no se puede escapar de disolver la Knéset y celebrar elecciones”, y agregó que había más de 61 diputados que no eran miembros de la coalición.
El domingo, el jefe de Ra’am, Mansour Abbas, anunció la congelación temporal de su membresía al gobierno, dada la creciente presión sobre el partido por los recientes enfrentamientos violentos entre los fieles musulmanes y la policía israelí en el Monte del Templo de Jerusalén.
Sin embargo, es cuestionable si realmente se pueden encontrar 61 votos para derrocar al gobierno, ya que el bloque de oposición liderado por Benjamín Netanyahu solo puede reunir 52-54 votos, y es dudoso que tal movimiento sea respaldado por muchos más diputados.
La decisión de Ra’am es en gran parte declarativa en esta etapa, porque el parlamento está en receso, aunque fuentes de la oposición dijeron que lo vieron como una oportunidad adicional para debilitar la coalición, alentar las deserciones y derrocar al gobierno.
Según reportes, la medida, que tendrá una duración de dos semanas y está coordinada con el primer ministro Naftali Bennett y el canciller Yair Lapid, tiene como objetivo aliviar la presión sobre el partido y evitar una ruptura permanente entre Ra’am y la coalición.
Los funcionarios de Ra’am parecen esperar que para cuando el parlamento se vuelva a reunir el 9 de mayo, la situación se calme.
El gobierno ya está en crisis después de que la diputada Idit Silman, del partido Yamina de Bennett, se deshiciera de la coalición, acabando con ello con su escasa mayoría parlamentaria.
El partido Likud, el más grande de la oposición, desde entonces ha estado tratando de sacar más diputados de la coalición, con la esperanza de reemplazar al gobierno.
Fuente: ©EnlaceJudío
