La policía de Jerusalén detuvo el fin de semana a cinco palestinos por atacar autobuses y coches que se dirigían al Muro Occidental durante la Pascua judía del mes pasado.
Los sospechosos proceden del Este de Jerusalén y Qalqilya, informó Ynet.
Se espera que los fiscales los acusen en los próximos días.
El ataque tuvo lugar en la mañana del 17 de abril, cuando un grupo de alborotadores se reunió y atacó los vehículos fuera de la Ciudad Vieja.
Los asaltantes rompieron las ventanas del autobús y causaron otros daños lanzando piedras contra el vehículo.
Un colaborador en un coche particular ayudó a retener el tráfico deteniéndose en la carretera, lo que permitió a los atacantes apuntar a los vehículos.
Varios autobuses resultaron muy dañados en el asalto, y algunos pasajeros resultaron heridos leves.
Los atacantes huyeron después del lugar, pero al menos dos fueron detenidos poco después en el Este de Jerusalén.
El mes pasado, la policía detuvo a 20 sospechosos por los disturbios que se produjeron entonces en la Ciudad Vieja, entre ellos algunos que supuestamente lanzaron piedras contra los autobuses.
Otros sospechosos fueron detenidos por lanzar piedras y petardos a la policía desde los tejados de la Ciudad Vieja, y por agredir a judíos ortodoxos que se dirigían a rezar al Muro Occidental.
Los atentados se produjeron en medio de una gran tensión en Jerusalén entre Israel y los palestinos.
El mes sagrado musulmán del Ramadán, que suele ser un periodo de fricciones, ha sido testigo de enfrentamientos regulares en el Monte del Templo, un lugar muy conflictivo.
El recinto de la Ciudad Vieja es el lugar históricamente más sagrado para los judíos, y la mezquita de Al-Aqsa, construida por la invasión islámica en la cima del Monte del Templo, es el tercer santuario más sagrado para los musulmanes, con base en una leyenda.
Fuente: Israel Noticias